No, no puede simplemente añadir cristales antibalas a su vehículo como lo haría con un cristal normal. No es tan sencillo. Instalar lunas antibalas implica un montón de cambios importantes porque este tipo de lunas son mucho más pesadas que las lunas normales utilizadas en los coches. Este peso adicional puede afectar a la forma en que el vehículo se maneja y se comporta en la carretera.
Para asegurarse de que el coche puede soportar con seguridad el peso añadido, es necesario realizar varios ajustes. Por lo general, esto significa reforzar las puertas y otras partes del coche. Por ejemplo, puede ser necesario reconstruir las puertas utilizando materiales más resistentes para soportar el peso del cristal antibalas. También puede ser necesario mejorar las bisagras y otras piezas que ayudan a las puertas a abrirse y cerrarse para que puedan soportar la tensión adicional.
Estos cambios son necesarios para garantizar que las puertas funcionen correctamente, incluso con el peso añadido. Si no se realizan estas modificaciones, las puertas podrían no abrirse o cerrarse con facilidad y, con el tiempo, podrían empezar a combarse. También es muy importante que el vehículo sea lo suficientemente resistente como para mantener a salvo a todos los ocupantes en caso de accidente.